Hace muy poco que Karlonnen cumplió años y no se me ocurría qué tarta hacerle.  De hecho, ni siquiera tenía seguro si íbamos a poder celebrarlo...

 Pero no podía dejar sin su tartita al creador de blogolosas (y al que damos la tabarra con nuestros problemas con los blogs) así que me puse a buscar y pensar qué hacer.

La verdad, tampoco sabía muy bien qué regalarle y no sé cómo, acabé mirando camisetas y encontré una que me encantó que tenía una imagen parecida al Vitruvio de Da Vinci pero en versión Homer Simson.  Me encantó, Karlonnen es todo un erudito de Los Simpson y la imagen es super graciosa.  Pero estaba agotada.  Maldición...  Seguí buscando y encontré un cojín de peluche en forma de enorme rosquilla de las que Homer tanto le gustan.  ¡Bingo! "P'a la saca".  Pero el Homer Vitruvio molaba tanto... ¡¡ Y si lo hago tarta !!

Dicho y hecho.  Lo que más me divirtió fue el principio, las cositas que Homer sujeta con las manos, los símbolos de su filosofía de vida...   el bocata de embutido, el mando de la tele, un birra Duff y un pepito de crema.  Una gozada de las gordas.

Pero ¿de qué hago el bizcocho?  YA me conocéis, me aburre hacer siempre lo mismo y no me acababa de decidir: ¿fresa? ¿chocolate? ¿vainilla? ¿turrón?...  Después de dos días dándole vueltas al tema se me ocurrió ¿y si lo hago de donuts?  Mezclé donuts molidos con la mantequilla en la batidora y prescindí de la parte de harina sin levadura adicional tradicionar del MSC.  El sabor no era demasiado reconocible pero el olorcillo cuando estaba horneándose... ¡¡¡ Buenísimo !!!  Como buena rosquilla americana, le hice el agujero en el medio, lo abrí por la mitad para rellenarlo con un poco de mermelada, puse chocolate fundido por encima y lo cubrí con ganache para pegar el fondant.  Estaba de vicio.

A la hora de plasmar en tarta un dibujo plano... las pasé un poco "canutas", no me acababa de convencer el resultado así que le puse un poco de barriguilla al personaje y le di un poco de volumen a las manos.

 

No me convenció demasiado la expresión, pero era lo que había...  Lo que más me sigue gustando siguen siendo los símbolos de identidad de Homer...

 

Creo que si volviera a hacerlo, cambiaría algunas cosillas.  En cualquier caso, vaya ideitas que se le ocurren a algunos... 

 

Muchas, muchísimas felicidades, Karlonnen (aunque publique con una semana de retraso).  A él tengo que agradecerle tener un blog, la existencia de blogolosas, haber vuelto a hacer tartas y muchas, muchísimas cosas más.