Es uno de los bizcochos más sencillos, esponjosos y ricos que he hecho.  Seguro que todo el mundo lo conoce del blog de Auro: es el famosísimo mayocake, o bizcocho de mayonesa.

"Si muchos bizcochos se hacen con huevo y aceite, ¿se podrán hacer con mayonesa?" Llevaba un tiempo preguntándome esto cuando di con esta receta que me pareció como caída del cielo, pero he tardado bastante en probar y me arrepiento de haber esperado tanto porque el resultado es deliciosamente esponjoso.  Sólo hice la mitad de la receta, podéis ver la de Auro para Fushion Cook pinchando aquí.

Es tan sencillo que sólo necesitarás:
1 huevo
1/2 taza de aceite
una pizca de sal
1/2 taza de azúcar
1 taza de harina
3 cucharadas de cacao
1/2 sobre de levadura
1/2 taza de agua
1/2 cucharada de canela (yo ne le puse)

La elaboración es fácil a más no poder.  Precalienta el horno a 180ºC y encamisa el molde que vayas a usar (a mí últimamente me ha dado por los moldes de papel, que no necesitan encamisado y además "visten" estupendamente los bizcochos si tienes que llevarlos a alguna parte).

Mezcla en un bol todos los ingredientes secos.

En otro bol, prepara la mayonesa con el huevo, el aceite y la sal (era mi primera vez montando mayonesa "a mano" y fue una gozada, se montó "en cero coma", estoy deseando repetir).

Añade la mezcla de ingredientes secos y remueve bien hasta que quede todo bien intregrado.  Agrega por último el agua y sigue moviendo hasta que tengas un mezcla homogénea.

Ya está.  No tiene más misterio.  Vierte la mezcla en el molde y hornéala hasta que esté hecha.  No la pases mucho porque es un bizcocho jugoso y perdería su gracia si se queda seco.  Es casi como un brownie aunque mil veces más esponjoso.  Sólo déjalo enfriar y cúbrelo si te apetece con una ganache de tu chocolate preferido.

Yo lo dejé tal cual.  Con un buen vaso de leche es una auténtica delicia. 

Pensaba añadir algo nuevo tunenado un poco, pero no he tenido tiempo así que el tuneado tendrá que esperar.  Mientras tanto, los que aún no hayáis probado este pedacito de nube chocolateada, animáos a intentarlo.  Es sencillísimo de hacer y tan esponjoso que da gloria.