No penséis que vais a ver una tarta de atletismo o de la peli "Carros de Fuego", no... Es una tarta del Atleti. Del atlético de Madrid. Pero no una tarta del atleti cualquiera, que está en juego mi "reputación friki".
Hay que tener una pasta especial para ser seguidor de este equipo. A triunfo por década como mucho y aún así leales siempre. Poco menos que héroes. Y como el atlético al que se la hicimos también le da a la guitarra de la Wii con el "Guitar Hero", quisimos mezclar conceptos y aprovechando que era su cumple y hay confianza, hicimos este injerto: el "Atleti Hero".
Efectivamente, el refrán tiene razón: "donde hay confianza, da asco". Jajajajaja.
Mástil de nutella y cuerpo de melocotón, esta guitarra es tamaño natural, tal cual la que yo misma tengo para jugar al "Guitar Hero". La verdad, no sabía muy bien cómo hacerla hasta que no me puse. Finalmente para el cuerpo me decidí por las rayas que bautizan a este tradicional equipo como "colchonero"...
.. con los laterales del azul del calzón (creo). Puse la púa y algunos botones de control pero (es lo que tiene también la confianza) no me dio tiempo a hacer el vibrato, así que se quedó sin él.
El mástil se quedó en negro y en lugar de simulacros de clavijas, planté el escudo del equipo.
La bandeja (de casi 80 cm de largo) fue un verdadero quebradero de cabeza pero por fin pude hacerme con un cartón suficientemente grande y aguantó el tipo hasta la fiesta; una barbacoa "pentatlón" pasada por agua y que me ha costado una amigdalitis pero en la que lo pasamos genial. Bueno, también me costó un paraguas, lo usamos para proteger la barbarcoa de la lluvia y acabó con tal peste a sardinas que hubo que sacrificarlo. Pobre...
Será que había hambre pero del pedazo de tarta (os podéis hacer una idea por el tamaño de bandeja que os he dado o si tenéis una guitarra de éstas en casa), no quedaron ni las migas.
A pesar de los estómagos ya llenos de morcillas, costillas, caracoles, papas arrugás con mojos, gambones, sardinas, butifarras y yo qué sé cuántas delicias más que con toda la paciencia del mundo y bajo condiciones de lo más estresantes lograron asar nuestras esforzadas cocineras.
Todo sea por celebrar un pentatlón más con nuestro anfitrión, un verdadero "atleti hero". Si alguien le cabe alguna duda de que su corazón es atlético, a las pruebas me remito...
¡¡¡ FELICIDADES, PABLO !!! Muchas gracias por reunirnos una vez más. Espero que en la próxima no llueva (o al menos que no llueva tanto)
Más sobre la fiesta aquí y aquí.
Ahora los padres atléticos ya tienen algo que contestar cuando sus hijos, con cara de total incomprensión les pregunten: "papá ¿por qué somos del atleti?"...