Mi tía cumplía años y no sabía qué tarta hacer para la ocasión.  Me di cuenta entonces de que en este último año ha habido un acontecimiento fundamental en su vida que ocupa toda su atención últimamente:  ¡¡ ha sido abuela !!  Y, como le pasa a todas las abuelas, se le cae la baba con su nieto, así que como la fiesta era familiar y tenía libertad de acción, se me ocurrió hacer un par de cajas de pañuelos de papel y un babero.

El babero es sólo para ella pero los pañuelos de papel... que rulen, que rulen... que andamos todos medio deshidratados en la familia porque el niño no puede ser más bonito.  Además, con 7 mesecitos está que te lo comes.  Vamos, que entendemos todos perfectamente a la feliz abuela pero como sería una barbaridad comerse al niño, nos comimos la tarta, las dos cajas de pañuelos (que no me quedaron más horteras porque no me entrené, pero es que no se me ocurría nada) de MSC de turrón.

Bueno, como veis unas tartas de lo más sencillas y con mucha "guasa".  Si las hago otra vez, prometo que me esmeraré más con la decoración y procuraré imitar alguna caja de pañuelos de verdad, pero es que no tenía ninguna cerca y mis neuronas estaban en huelga, las muy...

Fue un día estupendo, la comida estaba buenísima (muchísimas gracias, tía, y muchísima felicidades, que cumplas muchos más y que todos los veamos) y el niño... Para qué contaros, tendríamos que haber comprado una garrafa de arroba de Aquarius porque por lo menos las mujeres corremos un serio peligro de deshidratación en estos casos.