Todos en casa, los niños con vacaciones, sobras de bizcochos, restos de fondant de colores con los que no sabes qué hacer... ¿Por qué no ponerles a hacer muñecos de nieve de bizcobolas?  Es más sencillo de lo que parece y podrías tener a los niños entretenidos.

Para hacer la masa sólo necesitas desmigar los restos de bizcocho que tengas a mano o que más te gusten (también puedes probar con bizcochos de soletilla, con los de Mercadona salen bizcobolas muy ricas) y añadir queso crema hasta que tengas una masa firme, que no quede demasiado blanda para que pueda guardar la forma pero que siga siendo jugosa.

Primero forma los cuerpos y las cabezas.

Luego derrite el chocolate blanco de cobertura y cubre las cabezas.  Deja que el choco endurezca sobre una lámina de papel de horneado (antiadherente).

Después (esto debes hacerlo tú) retira las rebabas de chocolate con mucho cuidado y un cuchillito bien afilado hasta que queden así:

 

Reserva las cabezas y ahora cubre los cuerpos y déjalos de pie sobre el papel antiadherente pero, antes de que el chocolate endurezca, pon encima de cada cuerpo una cabeza para que así el choco que cubre el cuerpo sirva de pegamento.

 

Deja que el choco de los cuerpos endurezca.  De nuevo, usa un cuchillito afilado para retirar las rebabas de la base de los cuerpos y éstos ya estarán listos para ser decorados.

Con un rotulador de tinta comestible puedes dibujar los ojos, la boca, los botones del cuerpo...  Para hacer las narices yo usé candy melts de Wilton teñidos de naranja.  Son más espesos y endurecen a temperaturas más altas.  Forma las narices y usa luego este truco para pegarlas: calienta un vaso de agua en el microondas o pon un cacito de agua al fuego y, cuando la nariz haya endurecido, la coges de la punta y pegas la base al vasito o al cazo de forma que se derrita un poco; entonces la pegas a la cabeza y esperas que se sujete solita.  

¡Ya está!  Los  muñecos de nieve están listos para ser decorados al gusto de tus peques con los restos de fondant de colores que hayas acumulado.

 

Deja que se diviertan y que su creatividad vuele.  O deja volar la tuya, que de vez en cuando viene muy bien jugar a ser niño de nuevo.

Que tengáis muy felices fiestas y que el año 2010 que estamos a punto de estrenar os colme de felicidad y podáis disfrutarlo con salud y en la compañía de todos aquellos a quienes amáis.